CARIDAD.

¡Cuánta caridad hace falta!

Pero caridad no forzada, no obligada; la caridad no se puede estar pidiendo continuamente.

Si tienes la iniciativa de asociarte por colaborar con alguna ONG, has firmado tu sentencia de ser solicitado; mensajes SMS, emails, mensajes WhatsApp, y todo para que colabores, aparte de la colaboración que ya mantienes mensual.

¿Cuánta gente hay viviendo de las ONGs? ¿Y cuánto les llega realmente a los necesitados?

Pero la caridad hace falta, encauzarla correctamente, y que no abusen de ti.

En todo el mundo, y siempre, hay y habrá personas desfavorecidas, en este momento aún más cerca de nosotros; pero un acto de caridad va, desde una sonrisa a una palabra de aliento a alguien que lo necesite.

Muchas veces no es necesario ni que la caridad sea material. La caridad es un acto de bondad, de civismo y principalmente de humanidad.

La verdadera caridad es el deseo de ser útil a los demás sin pensar en recompensas.

No debería ser necesario pedirla; pero yo os invito a practicarla.

Foto extraída de la página: mondonedoferrol.com